La una de la mañana y una sensación de extraña,
Me decía que mis mañas me quitarían las alas,
De tanto vuelo que cojo no se cómo es el piso,
El sudor corre en mi frente y entre cuadras me deslizó,
Pienso y analizó, porque antes me dijeron,
Que la noche es un peligro si hoy estoy aquí de nuevo,
La calle está tan sola, pies se despegan del suelo,
Y la mente se abre siempre cuando en esto me desvelo,
El reino fungi se apodera de mis vegetales
Y toso con los plones adentrándome entre calles,
Las bolsas se contraen en la boca de los locos,
Y esa misma le habla y hasta le tuerce los ojos,
Yo sé de lo que hablo porque está Batalla es mía,
Y si no supiera que hago entonces no la libraría
Cuando salgo de una me vengo a meter en otra,
Cómo esa puta lujuria que se disfraza de sombra,
Al final esa costumbre es la que genera el ansia
Y sabemos que no cubre tolerancia a la sustancia,
Me encuentro con los parches pero ninguno rapea
Entonces yo no veo parches veo es a unas gonorreas,
El ego me consume y se ha fumado mi paciencia,
Se huelio todo mi orgullo y se soplo hasta la decencia,
Mi mente en decancia pero me alza la conciencia,
Palabras sin coherencia son filosofía sin ciencia,
Solo preguntas sin respuesta en las que siempre yo le vivo,
La esperanza no se pierde y se escapa la derribo,
enfrente de mil sordos grite todas mis plegarias,
La gente es un estorbo y no quisieron escucharlas,
El colmo de la ironía el sol está saliendo,
Amanece al parecer pero colores no estoy viendo,
El sol está grisacio, solo el color rosado,
Mi pipa está amarilla y solo me queda un pegado,
Ya me voy para mi casa y lo que he aprendido,
Que ningún malparido podría hoy estar vivo,
Entonces al final solo fueron las palabras,
Cómo el que dice estar sobrio pero sus venas se marcan.