Estoy en la esquina, mirando las deudas, Las facturas se acumulan, mi alma se quiebra. Como Residente, rimas afiladas, En el barrio oscuro, donde las luces son apagadas. Ajustando cuentas, como un hacker en la red, Mis deudas son letras, mi pluma es mi revólver. Sentado en la acera, bajo la luna amarilla, Con el perro ladrándome, la vida es una pesadilla. Eructando preocupaciones, como un vaso de cerveza, Apuntando al futuro incierto, sin mirilla ni certeza. Mientras hablo solo, como un loco en su monólogo, Las deudas me persiguen, como un lobo en el prólogo. Esto lo hago pa' sobrevivir, Pa' pagar mis cuentas, pa' no sucumbir. Mi primera deuda, como un tatuaje en la piel, La sangre es la tinta, la vida es un papel.revólver. Sentado en la acera, bajo la luna amarilla, Con el perro ladrándome, la vida es una pesadilla. Bajo la sombra de las promesas rotas, Mis pasos vacilan entre espinas y gotas. En el laberinto de esta existencia sombría, Busco una salida entre la oscuridad y la agonía. Con manos gastadas por el trabajo duro, Cada centavo cuenta, pero el futuro es oscuro. En este tablero cruel, soy peón y rey, Moviendo mis piezas en un juego sin ley. Las noches se alargan en esta senda sin rumbo, Persisto con mi carga, aunque el alma se hunda en el fondo. Pero sé que algún día, esta tormenta cesará, Y mis deudas, como lágrimas, se evaporarán. Esto lo hago pa' sobrevivir, Pa' pagar mis cuentas, pa' no sucumbir. Mi primera deuda, como un tatuaje en la piel, La sangre es la tinta, la vida es un papel.revólver.